jueves, 24 de diciembre de 2009

¡¡¡FELIZ NAVIDAD!!!

:::Que esta Navidad convierta... cada deseo en flor cada dolor en estrella cada lágrima en sonrisa cada corazón en dulce morada para recibir a Jesús, nuestro Salvador :::
Muchas gracias chikas por todo este año que han disfrutado y llorado con algunas novelas q hemos publicado y algunos cuantos chismesitos... en verdad gracias a todas...
Y esperamos Que en estas fiestas, la magia sea tu mejor traje, tu sonrisa el mejor regalo, tus ojos el mejor destino, y tu felicidad nustro mejor deseo..
¡¡¡FELIZ NAVIDAD!!!
Pau e Isa

martes, 15 de diciembre de 2009

LA HERMANDAD DE LA SANGRE 5

Night After Night
Kathryn Smith

Sinopsis:
Hace siglos que el Grial de la Sangre marcó el destino de Temple: él sería el vampiro que dedicaría su vida a proteger el magnífico cáliz. Desde aquel momento, muchos enemigos han tratado de atraparlo, pero sólo Vivian ha conseguido adormecer sus sentidos y resquebrajar su poder. El vampiro se siente atraído por la joven, pero ella debe lealtad a Rupert, su padre adoptivo y el más poderoso rival de Temple.La vida de los miembros de «La hermandad de la sangre» están en juego, y Temple debería utilizar a Vivian para salvarlos. La batalla final acaba de comenzar... y él tiene que luchar a muerte.¿Antepondrá Temple el deber al deseo?

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LA HERMANDAD DE LA SANGRE 4

De aquí a la eternidad
Kathryn Smith

Sinopsis:

Reign nunca había conocido a una mujer tan bella y tentadora como Olivia Gavin. En su noche de bodas, ella le ofreció su corazón y él, a cambio, atravesó con sus colmillos el blanco cuello de la joven para ligarla a él eternamente. Olivia, asustada y dolorida, escapó. Pero ahora ha vuelto. Necesita, no importa a qué precio, que Reign la ayude a recuperar a su sobrino. La condición que le impone su esposo es sencilla: debe compartir su lecho una vez más...

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LA HERMANDAD DE LA SANGRE 3


Pasión Eterna
Kathryn Smith

Sinopsis:

Tras seis siglos de vida como vampiro, Saint ha aprendido que debe mantenerse alejado de los humanos para evitar el sufrimiento. Pero todo cambia cuando recibe una llamada de socorro del burdel londinense Maison Rouge: algunas de sus trabajadoras, antiguas amigas del vampiro, han sido asesinadas, e Ivy Dearing, la hija de la dueña, está dispuesta a encontrar al criminal a toda costa. Saint sabe que sería mejor que Ivy se quedara al margen, pero es irresistible... La muchacha despierta en él un deseo tan fuerte como su sed de sangre.

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LA HERMANDAD DE LA SANGRE 2

Amor inmortal
Kathryn Smith
Sinopsis:
Han pasado trescientos años desde el asesinato de mi amada esposa. He dedicado mi vida a destruir a los monstruos que acabaron con ella. Mi obsesión por acabar con ellos, me ha apartado del mundo, salvo cuando la lujuria por la sangre de los hombres invade mi cuerpo inmortal. Pero ahora hay otro que busca venganza también. Le llaman, La cazadora, cuando nuestros caminos se crucen, uno de nosotros debe morir...Pero ahora que he visto a Marika Korzha, ¿cómo puedo ser yo el instrumento de su ruina? Su belleza y su valor me impulsan a actuar como hacia siglos que no lo hacía. Y sólo yo se su oscuro secreto, ella es una vampiro como yo…Somos más parecidos de lo que ella piensa. Ambos anhelamos justicia, venganza. . . Y pasión. . .Y la absolución por nuestros pecados. Y no podemos negar el deseo que nos consume. .

LA HERMANDAD DE LA SANGRE 1

Mía para siempre
Kathryn Smith
Sinopsis:
Durante siglos, Chapel ha servido como guerrero, rehuyendo el contacto humano. Ahora se ve obligado a viajar a Inglaterra donde un antiguo mal puede ser despertado. Prudence Ryland casi ha perdido la esperanza. Necesita desesperadamente un milagro y cree que puede haberlo encontrado. Pero está a punto de descubrir que el mayor milagro de todos le aguarda en los brazos de Chapel. Lo único que debe hacer es lograr que su reticente vampiro crea en el poder del verdadero amor.Me llaman Chapel… Soy un vampiro…Durante casi seis siglos he merodeado en la oscuridad, vagado noche tras noche, ya no como mortal sino como inmortal. ¿Cómo podría volver al pasado para cambiarlo, como podría volver a aquel día en el que entré en el santuario de los Caballeros Templarios para rescatar el Santo Grial, y acabar descubriendo que aquella hermosa copa en la que pose mis labios no era sino una copa que me condenaría a estar maldito durante siglos?Ahora, el día y los humanos me esquivan, vivo sediento de su sangre… estoy maldito… Y sin embargo... Nunca he conocido a una doncella como Prudence Ryland, cuya belleza y espíritu han conseguido despertar el corazón que yo hacia muerto y helado. Prudence está muy enferma, ve como su vida se le escapa, y busca la liberación de su alma en el Santo Grial, sin saber que si lo toca no liberará su alma sino que la condenará a una maldición… Debo ayudarla, ya que en seiscientos años, ninguna otra mujer ha despertado en mí la pasión como ella lo hace.Pero, ¿debo ofrecer a mi amada aquello que ella más desea, un beso, un maldito beso que la condene a la prisión de la inmortalidad?

viernes, 11 de diciembre de 2009

DESCARGA 'TEMPTED' - En Español

TEMPTED - TENTADA (PC. Cast y Kristin Cast)


Sinopsis :


Así que... si piensas que después de desterrar a un ser inmortal y vencer a una Alta Sacerdotisa, salvar la vida de Stark, morder a Heath, tener dolores de cabeza por Erik, y casi morir, Zoey Redbird puede tener un descanso. Lamentablemente, no hay descanso en la Escuela de la Casa de la Noche para la Alta Sacerdotisa en entrenamiento y su grupo de amigos.Maniobrar con tres chicos es todo menos un alivio del estrés, especialmente cuando uno de ellos es un sexy Guerrero que para proteger a Zoey puede sentir sus emociones.Hablando de estrés, la fuerza oscura que acecha debajo de los túneles prohibidos de Tulsa se esta esparciendo y Zoey comienza a creer que Stevie Rae podría ser responsable de algo más que de un grupo de inadaptados novatos rojos.Las visiones de Afrodita le advierten a Zoey que se mantenga lejos de Kalona y su oscuro atractivo, pero también muestran que Zoey tiene el poder de detener el mal inmortal. Pronto se hace evidente que Zoey no tiene ninguna opción: Si ella no va a Kalona él le exigirá una vehemente venganza sobre los más cercanos a ella.¿Zoey tendrá el valor de arriesgar su vida, su corazón y su alma?


martes, 8 de diciembre de 2009

¡¡¡GRACIAS CHIKOS!!!!


Gracias a foro de Alishea Dream's y a sus colaboradores por la traduccion de esta increible saga la casa de la noche, que nos hicieron reir y llorar gracias nuevamente chikos


Staff de Traducción(Saga Casa de la Noche):

Nandy,
Glad,
Roza B,
AnaIsabella_Cullen88,
Belen,
Qwely,
Angel.Alder,
Haley_jsb
Elena,

Erick,
Solcis,
Camen

EPILOGO

ZOEY

Di un largo suspiro de satisfacción. Paz… Con sinceridad, no podía recordar nunca haberme sentido tan libre del estrés. Diosa, era un día magnifico. El sol era sorprendente, todo dorado y brillante en un cielo azul celeste brillante, que debería haber herido mis ojos. Pero no lo hizo.
Era un poco extraño. La Brillante luz del sol debería haberme herido los ojos.
Vale.
Oh, está bien. Fuera lo que fuera.
El prado era increíblemente hermoso. Me recordaba algo, comencé a intentar recordar el que, pero decidí que no quería pensar. El día era demasiado bonito como para pensar. Solamente quería respirar el aire dulce del verano y exhalar toda la estúpida tensión que había ido incrementándose como una espiral en mi cuerpo.
La hierba estaba acariciando suavemente mis piernas, como delicadas plumas.
Plumas.
¿Por qué tenía plumas?
"No, ni lo pienses." Sonreí cuando mis palabras se hicieron visibles, creando patrones de un púrpura brillante en el aire.
Delante de mí había una fila de árboles que estaban llenos de flores blancas que me recordaron a los copos de nieve. El viento rozaba suavemente sus copas, produciendo una suave música en el aire con la que baile, salte haciendo piruetas por todo el bosque, mientras respiraba profundamente el dulce perfume de las flores.
Me pregunté por un segundo dónde estaba, pero no parecía algo tan importante. O al menos no tan importante como la paz, la música y el baile.
Entonces me pregunté cómo había llegado hasta aquí. Eso me detuvo. De acuerdo, realmente no me detuvo, simplemente me desacelero
Ahí fue entonces cuando lo oí. Era algo que sonaba como un zing, plop. Me parecía cómodamente familiar, así que lo seguí a través de la arboleda. Más azul se asomó a través de los árboles, esta vez me recordó a los topacios y las aguamarinas. Agua.
Con un grito feliz sali corriendo de entre los árboles hacia la orilla de un lago sorprendentemente claro.
Zing, plop.
El sonido venía desde detrás de una vuelta de la orilla del lago, así que lo seguí, tarareando mi canción favorita de Hairspray en voz baja para mí misma.
El muelle se adentraba en el lago, era perfecto para pescar. Y, efectivamente lo era, ya que había un chico sentando en el extremo del muelle, lanzando el sedal con un pequeño destello brillante y cayendo en el agua con un pequeño ruido.
Era extraño. Yo no sabía quién era, pero de repente un pánico terrible interrumpió mi maravilloso y hermoso día. ¡No! ¡No quiero verle! Movía mi cabeza negando y empecé a retroceder, entonces fue cuando tropecé con una rama y eso le hizo darse completamente la vuelta.
La gran sonrisa de su bello rostro desapareció cuando me vio.
"¡Zoey!"
Era la voz de Heath. Mi memoria se apresuró a regresar. La tristeza me obligo a ponerme de rodillas. Corrió hacia mí, para cogerme en sus brazos cuando me caí.
"¡Pero tú no perteneces aquí! ¡Estás muerto!" Lloré contra su pecho.
"Zo, cariño, este es el Otro Mundo. No soy yo el que no debe estar aquí… eres tú."
La memoria se estrello sobre mí, ahogándome con la desesperación y la oscuridad, y la realidad destrozo mi mundo y todo se volvió negro.

Fin por ahora.

CAPITULO 40 - Tempted (TENTADA)

HEATH

Heath se preguntó si Zo sabía que estaba rompiéndole el corazón. Él no quería alejarse de ella. No quería eso. En realidad, él la necesitaba. El problema era que el también deseaba lo mejor para ella—él siempre lo hacia.
Desde aquella vez en la escuela primaria. Él recordó el día que se enamoró de ella.
Su mamá se había enojado con ella y la había llevado al trabajo de una de sus amigas, que tenia un salón de belleza de chicas. Habian decidido—la madre de Zo y la amiga—que sería lindo cortar el largo y hermoso, pelo oscuro de Zo. Asi que al dia siguiente, Zo había ido a las clases de tercer grado con el pelo super-corto que lucia extrañamente entresacado por todas partes y poco definido.
Todos los chicos habían estado susurrando y riéndose de ella. Sus grandes ojos café lucian enormes y asustados, y Heath creyo que nunca antes habia visto a alguien que fuera tan hermosa como ella.
Él se le había acercado y le había dicho que le gustaba su pelo—en frente de toda la cafeteria. Ella había lucido como si estuviera a punto de llorar, así que él había llevado su bandeja, y se sento junto a ella, aunque no era muy cool sentarse junto a una chica.
Ese día ella había hecho algo con su corazón. Desde ese entonces ella había tenido su corazón.
Entonces, aquí estaba él, en busca de un chico que tenía un trozo del corazón de Zoey y que era él más conveniente para ella. Heath se pasó la mano por su pelo. Todo esto iba a acabar algún dia. Algún día Zo volveria a Tulsa, y aunque ella estuviera el mayor tiempo en la Casa de la Noche, ella estaría con él, cuando lo quisiera. Irian al cine otra vez. Ella iria a verle a los juegos de football en la OU. Todo seria normal de nuevo, o tan normal como pudieran.
Él podría mantenerse firme hasta entonces. Cuando toda la mierda con Kalona sea más clara—y Zo lograra poner todo en orden, Heath estaba seguro de eso_ cuando toda esta mierda mejorara, las cosas serían mejores. Él tendría de regreso a su Zo. O al menos tan suya como quisiera ser. Y eso era suficiente para él.
Heath siguió la ruta que lo guiaba fuera del palacio, todavía yendo en la dirección que Stark había tomado. Él miró alrededor y no pudo distinguir demasiado excepto el gran muro de piedra a su izquierda, y un parque lleno de cercos de setos que eran casi tan altos como su cabeza, a su derecha. Él busco en el parque mientras caminaba, percatándose de que los vallados creaban alguna clase de patrón circular, entrelazandose. Entonces decidió que debería de estar en uno de esos viejos laberintos _ un laberinto, él finalmente recordó la historia de la mitología griega acerca del Minotauro en la isla de algún rey rico, cuyo nombre no había manera de que pudiera recordar.
¡Demonios!, él no se había dado cuenta de lo oscuro que estaba hasta que noto que se estaba alejando de las luces del palacio. Estaba quieto aquí afuera, también. Y aun en la quietud él podía oír el chapoteo de las olas rompuendo contra un lado de la pared. Heath se preguntó si él debería gritar para encontrar a Stark, pero decidió que, nah, asi como Zo, él necesitaba un poco de tiempo para sí mismo.
Todo este asunto de los vampiros era demasiado para ingerir, y era normal que el necesitase un tiempo para poder procesarlo. No es que él no pudiese tratar con Stark y los otros vampiros. ¡Demonios!, a él incluso le gustaban los vampiros_ y también los novatos. Y si pensaba muy bien en eso, él en realidad pensaba que Stark era un buen chico. Simplemente, era Kalona quien malograba todo.
Entonces, como si sus pensamientos le hubieran llevado hacia el inmortal, Heath oyó la voz Kalona yendo a la deriva a través de la noche vacia, él bajó la velocidad de sus pasos, cuidadoso por no hacer crujir alguna piedra en su camino.
“Todo va de acuerdo a nuestros planes” Kalona decía.
“¡Odio la farsa! No soporto que fingas ser algo que no eres para ella.”
Heath reconoció la voz de Neferet y avanzo lentamente. Sumergiendose en lo más profundo de las sombras, presionándose contra pared, y guardando absoluto silencio. Las voces venían del parque, frente a el a su derecha, y mientras se acercaba cada vez más, se fijo que había una discontinuidad en el vallado, obviamente una salida, y dentro del laberinto pudo divisar a Kalona y Neferet.
Estaban de pie al lado de una fuente. Heath dio un suspiro vacio de alivio. El sonido de la caída del agua debió de haber disimulado el ruido de sus pasos. Presionándose contra el frío muro de piedra, él observó y escuchó.
“Tu le llamas farsa. Yo le veo de otra manera” dijo Kalona.
“Y es asi que puedes mentir y aun asi, parece que dices la verdad” Neferet dijo las palabaras abruptamente hacia él.
Kalona se encogió de hombros. “Zoey quiere la verdad__así que estoy dándole la verdad”
“Selectivamente” dijo Neferet.
“Por supuesto. ¿No es lo que hacen todos los mortales, vampiros, humanos, o novatos, seleccionar sus verdades?”
“Mortales. Dices eso con si fueras algo más.”
“Soy inmortal, lo cual me hace diferente. Incluso diferente a ti, aunque los poderes de Tsi Sgili te transforman en algo que está próximo a un inmortal.”
“Sí, pero Zoey no esta cercana a ser una inmortal. Todavía creo que la deberíamos de matarla.”
“Eres una criatura sedienta de sangre.” Kalona se rió. “¿Desearias cortarle la cabeza?”
“No seas ridículo. No la mataría de la misma forma que lo hice con los demas. Seria demasiado obvio. Ella simplemente podría tener un pequeño accidente mientras visita Venecia, mañana o en algún otro momento.”
El corazón de Heath golpeaba ruidosamente que él estaba seguro de que podrían oírle. ¡Neferet había matado a dos profesores de Zoey! Y Kalona estaba al tanto de eso y crei que Neferet era divertida. No había manera alguna de que Zo creyera que aun hay algo bueno dentro de él después de que supiera esto.
“No”, Kalona decía, “no vamos a matar a Zoey. Pronto ella vendrá a mí voluntariamente; he plantado las semillas para eso. Todo lo que necesito hacer es esperar que estas florezcan, y entonces sus poderes, los cuáles son vastos aunque ella es mortal, estarán a mi disposicion.”
“Nuestra disposición” Neferet le corrigio.
Una de las oscuras alas de Kalona se movio rápidamente hacia adelante, acariciando un lado del cuerpo de Neferet, causando que ella se contornee hacia él. “Por supuesto, mi reyna“, él murmuro antes de besarla.
Heath tenía la impresión de que estaba observando porno, pero él estaba atrapado allí. No podía moverse. Él probablemente tendría que quedarse allí, hasta que ellos terminaran lo que estaban haciendo, entonces él podría esfumarse, podría ir hacia Zoey, y le podría contar todo lo que el había logrado oír.
Pero Neferet le sorprendió apartandose de Kalona. “¡No!. No puedes hacer el amor con Zoey en sus sueños, y comertela con los ojos delante de todo el mundo, y esperar que yo te abra mi cuerpo. No seré tuya esta noche. Ella es demasiado entre nosotros.” Neferet retrocedió alejándose de Kalona. Incluso Heath quedo capturado por su belleza. Su grueso pelo castaño-rojizo lucia salvaje a su alrededor. Las cosas sedosas que se plegaron alrededor de su cuerpo lucian como una segunda piel, y sus senos quedaron casi completamente al descubierto mientras ella respiraba duro y rapido. “Sé que no soy inmortal, ni soy Zoey Redbird, pero mis poderes, también, son vastos, y deberías de recordar que maté al último hombre que intentó reclamarnos a mí y a ella.” Neferet camino rápidamente alejandose. Con un movimiento de su mano ella dividió el vallado frente a ella y paso a través de él, dejando a Kalona de pie y solo, y siguiéndola con la mirada bajo la luz tenue.
Heath se preparba para retroceder lentamente cuando Kalona giro su cabeza y sus ojos ámbar fueron directamente hacia donde el estaba de pie.
“Entonces, pequeño humano, ahora tienes una historia para contarle a mi Zoey,” él dijo.
Heath miró directamente a los ojos inmortales y él supo dos cosas más allá de cualquier duda. Una, era que esta criatura iba a matarle. La segunda, que de cierta forma él tenia que mostrarle a Zoey la verdad antes morir.
Heath no se sobresaltó bajo la mirada fija de la criatura. En lugar de eso él usó toda la fuerza de voluntad que había aprendido a tener en una clase diferente de campo de batalla—una cancha de fútbol—y trato de canalizar su fuerza atraves de la unión de sangre, de su imprenta, tratando de encontrar el elemento con el que Zoey tenia la afinicidad mas poderosa—el espíritu.
Su alma grito con fuerza en medio de la noche: ¡Espíritu, venga a mí! ¡Lleve este mensaje para Zo! ¡Dígale que tiene que encontrarme!
Entretanto con una voz serena le dijo a Kalona,”Ella no es tu Zoey.”
“Ah, ella lo es”, dijo Kalona.
¡Zo! ¡Ven por mí! El alma de Heath gritaba.
“Nah, tu no conoces a mi chica.”
“El alma de tu chica me pertenece y no dejaré que Neferet o tu o alguien mas cambie eso.” Kalona comenzó a caminar hacia Heath.
¡Zo! ¡Soy yo, nena! ¡Ven por mí!
“¿Cuál es esa expresión que usan los vampiros?” se pregunto Kalona. “Creo que es —la curiosidad mato al gato. Parece que eso se aplica a esta situación”.

STARK


“Soy un idiota”. Stark murmuro para sí mismo mientras caminaba hacia la grandiosa entrada del palacio.

“Señor, ¿necesita usted guia?” Pregunto alguien en el interior, que estaba de pie en la puerta.

“Sí, necesito saber dónde está la suite de Afrodita. Usted sabe, ¿la profetisa humana que vino aquí con nosotros hoy? Oh, soy Stark, Guerrero de la Alta Sacerdotisa Zoey Redbird”.

“Sabemos quién es usted” el vampiro dijo. Sus ojos se fijaron en los tatuajes rojos de Stark. “Son fascinantes”.

“Sí, bien”, ‘fascinante’ no era una palabra que el usaría.

El guerrero sonrió. “Usted no estas unido a ella por mucho tiempo, ¿verdad?”

“No. Simplemente algunos días”.

“Se pondra mejor—y peor”.

“Gracias. Creo.” Stark resopló, expulsando un largo aliento. Si bien Zoey le había sacado fuera de quicio, él sabía que nunca podría alejarse de ella otra vez. Él era su Guerrero. Su lugar, no importa cuán duro llegara a ser, era estar a su lado.

El guerrero se rió. “La suite que usted busca está en el ala norte del palacio. Vaya hacia la izquierda desde aquí, tome la primera escalera que esta a su derecha. En el segundo piso, esta la suite entera de cuartos que han sido asignados a su grupo. Usted encontrará a sus amigos allí”.

“Gracias de nuevo.” Stark comenzó a ir por donde el guerrero le había enviado, caminando rápidamente. Él tenía un presentimiento que le picaba en la parte trasera de su cuello. Él odiaba tener ese presentimiento. Significaba que algo malo iba a pasar, y también significaba que no era tiempo para que él se enfurezca con Zoey.

Pero era tan difícil para él. ¡Él sintió su atracción hacia Kalona! ¿Por qué demonios ella no podía ver que el tipo era malo? No habia nada en él para salvar—probablemente nunca hubo nada en su interior que valiera la pena salvar.

Stark tenía que convencerla que él tenía razon. Y para hacer eso él tenia que detener que sus sentimientos por ella hicieran un lio en su cabeza.

Zoey era una chica lista. Él tenía que hablar con ella. Serenamente. Y ella tendría que escucharle. Desde la primera vez que se habían conocido, antes de que fueran algo juntos, ella le había escuchado. Él sabía que podría hacer que ella le escuche de nuevo.

Stark subio las escaleras de tres en tres a la vez. La primera puerta a su izquierda estaba semi abierta, y él pudo ver que el pequeño cuarto lujoso tenía un par de esos pequeños sofas y un montón de sillas incómodas—completamente hechas en colores dorados y plateados. ¿Es que acaso asi no iban a mancharse? Él oyó el murmullo de voces, y apenas abrio la puerta cuándo las emociones de Zoey le dieron una bofetada como una ola gigantesca.

¡Miedo! ¡Ira! ¡Confusión!

¿Qué es lo que ella estaba sintiendo que le causaba esta mezcla de confusión, que él no podía entender nada excepto lo más bajo de sus sentimientos?

“¿Stark? ¿Qué sucede?” Darius estaba allí, frente a él.

“¡Zoey!” Él logró hablar con voz áspera. “¡Ella está en problemas!” Y entonces la fuerza de todo eso, literalmente le hizo tambalearse. Él habría caído si Darius no le hubiera sujetado.

“¡Contrólate! ¿Dónde está ella?” Darius le tomo por los hombros y le sostuvo firmemente.

Stark miro hacia las caras preocupadas de los amigos de Zoey quienes le miraban fijamente. Él negó con la cabeza, intentando pensar detenidamente en el terror que había en su mente. “¡No puedo!—yo—“

“¡Tu debes! No intentes pensar. Simplemente deja que tus instintos cundan. Un Guerrero siempre puede encontrar a su señora. Siempre”.

Su cuerpo temblaba, pero Stark asintió hacia él, aun inquieto, tomo tres respiraciones profundas y después dijo: “¡Zoey!”

Su nombre pareció hacerse eco en el aire a su alrededor. Él se concentró en eso—y no en el caos que había en su mente. Él pensó en silencio, Zoey Redbird, mi señora.

Y como si las palabras se hubieran convertido en un andarivel, comenzaron a llevarle hacia adelante. Stark corrió.

Él podía sentir a Darius y los demás a sus espaldas. Él vagamente vio la mirada sorprendida en la cara del guerrero con el que recientemente había hablado, tenia que ignorar todo. El solo tenía que pensar en Zoey y dejó que la fuerza de su juramento lo llevase hacia ella.

Tuvo la impresión de que volaba. No recordó como es que encontro el camino a lo largo del laberinto, pero más tarde él recordó el sonido de las piedras machacadas bajo sus pies mientras el se alejaba de Darius quien iba a una super-velocidad.

A pesar de eso, el llego tarde.

Si Stark hubiera vivido por quinientos años a él nunca se le olvidaria lo que él vio cuándo se detuvo abruptamente en el camino. La escena por siempre sería grabada a fuego en su alma.

Kalona y Heath estaban muy lejos de él. Lo dos estaban frente al muro que la isla tenia como protección de los ojos humanos-venecianos.

Zoey estaba mucho más cerca a él. Simplemente a unas cuantas yardas, pero asi como él, ella también corría. Stark le observo levantar las manos. Y al mismo momento ella ordenó, “¡Espiritú! ¡Ven a mí!” Kalona también alzó sus manos, ahuecando la cara de Heath como si le le estuviera acariciando. Entonces en un movimiento veloz, e imparable, el inmortal caído torcio la cabeza de Heath, rompiendo limpiamente su cuello y matándole instantáneamente.

Una voz desgarro su alma, y estaba tan llena de angustia que Stark apenas reconoció que era de ella, Zoey gritaba, "¡No!" Y le lanzó la bola resplandeciente de espíritu a Kalona.
Kalona dejó caer a Heath y se giro rápidamente para afrontarla, su expresión completamente conmocionada. La potencia del elemento le pegó, arrojándole en el aire y tirándole sobre la pared, haciéndole caer en el océano dónde, con un grito de desesperación, las enormes alas de Kalona le elevaron del agua y le llevaron hacia arriba, hacia la fría noche.
Pero a Stark le importo una mierda lo que le sucediera a Kalona o incluso a Heath. Era por Zoey por quien corrió. Ella yacia arrugada en el suelo no lejos del cuerpo de Heath. Ella estaba boca abajo, y Stark supo la terrible verdad antes de alcanzarle. Aun asi, él cayó de rodillas y la giro suavemente entre sus brazos. Sus ojos estaban mirándole fijamente, pero estaban vacios.
Excepto por el contorno de color zafiro de una marca, propia de un novato normal, todos sus tatuajes se habian ido.
Darius llego hacia ellos, primero. Él se puso de rodillas al lado de Zoey, tratando de tomarle el pulso.
“Ella vive” dijo Darius. Y fue allí, cuando él proceso lo que estaba observando y con un jadeo dijo, “¡Diosa! Sus tatuajes.” Él posó la mano sobre la cara de Zoey. “No entiendo”. Negando con la cabeza y totalmente desconcertado, su mirada se fijo en Heath. “Es el chico—“
“Murio” dijo Stark, asombrado por que su voz sonara casi normal, aun cuando todo dentro de él gritaba.
Afrodita y Damien se acercaron corriendo.
“¡Oh, Diosa!” Afrodita dijo, en cuclillas al lado de la cabeza de Zoey. “¡Sus tatuajes!”
“¡Zoey!” Damien gritó.
Stark oyo cuando Jack y las Gemelas se les unieron. Lloraban. Pero todo lo que él podía hacer era sostenerla más apretadamente entre sus brazos y sujetarla cerca. Él tenía que protegerla. Él tenía que hacerlo. Fue la voz de Afrodita lo que finalmente penetró en su pena y logró llegar hacia él.
“¡Stark! Tenemos que llevar a Zoey de regreso al palacio. Alguien allí puede ayudarle. Ella aun esta viva.”
Stark busco la mirada de Afrodita. “En este momento, su cuerpo simplemente esta respirando; pero solo es eso”.
“¿De qué hablas? Ella todavía vive” Afrodita repitió tercamente.
“Zoey vio como Kalona mato a Heath y ella llamo el espíritu para intentar detenerle, pero ella llego muy tarde para salvarle”. Así como yo llegue muy tarde para salvarle a ella, la mente de Stark gritaba. Pero con una voz desconocida y calmada, él continuó explicando. “Cuando ella le lanzo el Espiritu a Kalona, Zoey sabia que ya era demasiado tarde, y su alma se desbarato. Lo sé porque estoy unido a su alma y yo sentí como se destrozó. Zoey ya no esta aquí. Éste es simplemente un caparazón vacio”.

Entonces James Stark, el Guerrero de Zoey Redbird, dobló su cabeza y comenzó a llorar.

CAPITULO 39 - Tempted (TENTADA)

ZOEY

Sintiéndome caliente y fría al mismo tiempo, arrastré mi mirada de Kalona y encaré al Consejo.
-“Gracias. Encantada de estar aquí” – dije.
-“Encantada de conocerte” – respondió Duantia y continuó suavemente. – “Nuestra hermana, Lenobia, nos informó de que tras la ausencia de Neferet en tu Casa de la Noche, has sido nombrada Alta Sacerdotisa, así que representarás su voluntad”.

-“Es totalmente inapropiado para una novata ser nombrada Alta Sacerdotisa” – dijo Neferet. Sabía que estaba completamente cabreada, pero en lugar de demostrarlo, me sonrió indulgentemente, como si fuera una niña pequeña que había sido atrapada jugando a vestirse con la ropa de su madre. – “Sigo siendo la Alta Sacerdotisa de la Casa de la Noche de Tulsa”.

-“No si el Consejo de tu Casa te ha depuesto” – dijo Duantia.

-“La aparición de Erebus y la muerte de Shekinah ha agitado enormemente a la Casa de la Noche, especialmente después de los terribles y trágicos asesinatos de dos profesores cometidos por humanos. Me entristece, pero los miembros del Consejo de mi Casa no están pensando con claridad”.

-“Que la Casa de Tulsa está confundida es innegable. Sin embargo, reconocemos su derecho a hacer el nombramiento de una Nueva Alta Sacerdotisa, aunque es altamente inusual para una novata ser elegida para la posición” – dijo Duantia.

-“Ella es una novata altamente inusual” – dijo Kalona. Oí la sonrisa en su voz. No podía mirarle.

Otro miembro del Consejo habló. Sus ojos oscuros brillaron y su voz era cortante, casi sarcástica. Pensé que debía ser Thanatos, la vampira que había elegido el nombre griego para ‘muerte’. –“Es interesante que hables a su favor, Erebus, ya que Lenobia dice que Zoey tiene otra versión sobre quién eres”.

-“Dije que era inusual, no infalible” – dijo Kalona. Bastantes de los otros miembros se rieron, igual que varios vampiros de la audiencia, aunque Thanatos no parecía divertida. Podía sentir a Stark tensarse detrás de mí.

-“Entonces, dinos, inusual y muy joven Zoey Redbird, ¿quién crees que es nuestro inmortal alado?” – Mi boca estaba tan seca que tuve que tragar dos veces antes de poder hablar. Y entonces cuando las palabras vinieron, lo que dije me sorprendió, como si mi corazón las dijera sin pedir permiso a mi mente.

-“Creo que ha sido montones de cosas diferentes. Creo que solía ser cercano a Nyx, pero no es Erebus”.

-“Y si no es Erebus, ¿quién es?” – Me centré en la sabiduría de los ojos de Duantia e intenté bloquear todo lo demás diciendo sólo la verdad.
-“La gente de mi abuela es Cherokee, y tienen una vieja leyenda sobre él. Le llamaban Kalona. Vivió con los Cheroqui después de caer del Reino de Nyx. No creo que fuera el mismo entonces. Hizo cosas terribles a las mujeres de la tribu. Engendró monstruos. Mi abuela me dijo cómo le atraparon. Incluso había una canción que la gente entonaba que contaba cómo podía ser liberado de su prisión, direcciones que Neferet siguió, lo que es la razón de que él esté aquí ahora. Creo que está con Neferet porque quería ser el consorte de una diosa, y creo que estropeó su decisión. Neferet no es una diosa. Ni siquiera es una Alta Sacerdotisa de la Diosa”. – Mi proclamación fue recibida con exclamaciones de indignación e incredulidad, la más alta viniendo de Neferet.
-“¡Cómo te atreves! ¿Como si tú, una niña novata pudieras saber quién soy para Nyx?”
-“No, Neferet” – la encaré ante la Cámara del Consejo. – “No tengo ni idea de quién eres para Nyx. No acabo de entender en que te has convertido. Pero sé quién no eres. No eres la Alta Sacerdotisa de Nyx”.

-“¡Porque crees que me has sustituido!”

-“¡No!, porque le diste la espalda a la Diosa. No tiene nada que ver conmigo” – dije.

Neferet me ignoró y llamó al Consejo. –“Está encaprichada con Erebus. ¿Por qué debo estar sujeta a esta difamación de una niña celosa?”

-“Neferet, has dejado claro que tu intención es ser la siguiente Alta Sacerdotisa de los Vampiros. Si tienes ese título, debes ser suficientemente sabia para lidiar con todos los tipos de controversia, incluso cuando te envuelven a ti” – Duantia miró de Neferet a Kalona.

-“¿Qué dices sobre el discurso de Zoey?” – Podía sentirle mirándome, pero mantuve mis ojos fijos en Duantia.

-“Digo que cree que dice la verdad. Y admito que mi pasado ha sido violento. Nunca he pedido infalibilidad, tampoco. Hace poco que encontré mi camino, y dentro de ese camino está Nyx” – no había forma de que no pudiera oír la verdad que sonaba en sus palabras. Incapaz de detenerme, mis ojos se atrajeron a él. –“Mis experiencias son la explicación de por qué me siento tan seguro sobre volver a las antiguas formas, donde una vez los vampiros y sus Guerreros vivían en la tierra, orgullosos y fuertes, en lugar de tener sus Marcas cubiertas, como si la luna creciente de la Diosa fuera algo de lo que debieran estar avergonzados. Los vampiros son los niños de Nyx, y la Diosa nunca quiso que te encogieras de miedo en la oscuridad. ¡Déjanos a todos salir a la luz!” – Era magnífico. Mientras hablaba, sus alas habían empezado a desplegarse. Su voz estaba llena de pasión. Todos le miraron. Fascinados por su belleza y pasión todos queríamos creer en su mundo.

-“Y cuando estéis listos para dejaros conducir por la Encarnación de Nyx y su consorte Erebus, volveremos a las antiguas formas, así que debemos estar todos orgullosos y fuertes, y no someterse al cautiverio y a los prejuicios de los humanos” – dijo Neferet, mirando gloriosa detrás de él pasando su brazo posesivamente a través de él. –“Hasta entonces, escuchad los quejidos de los niños cuando Erebus y yo reclamemos a Capri de esos que se han instalado en nuestro antiguo hogar demasiado tiempo”.

-“Neferet, el Consejo no va a declararle la guerra a los humanos. No puedes forzarlos a dejar sus hogares en la isla” – dijo Duantia.

-“¿Guerra?” – Neferet se rió, sonando sorprendida y divertida. – “Duantia, obtuve el Castillo de Nyx de los humanos ancianos que lo habían dejado en mal estado. Ninguno de vosotros del Consejo ha comprobado que podíamos haber recuperado nuestro antiguo hogar en cualquier momento de las dos décadas pasadas” – los ojos verdes de Neferet recorrieron la cámara. Con su pasión, cautivó a la audiencia mientras hablaba. – “Ahí los vampiros encontraron la belleza de Pompeya. Ahí los vampiros gobernaron la Costa de Amalfi, conduciéndonos a siglos de prosperidad con su sabiduría y benevolencia. Es ahí donde encontraréis el corazón y el alma de Nyx y la riqueza de la vida que desea para su gente. Y ahí nos encontraréis a Erebus y a mí. ¡Uníos a nosotros si os atrevéis a vivir otra vez!” – se dio la vuelta y, con un elegante giro, salió majestuosamente de la cámara.

Antes de seguirla, Kalona hizo una referencia respetuosamente al Consejo con el puño en el corazón. Entonces me miró y dijo: - “Encantado de verte, encontrarte y verte otra vez”– cuando abandonaron la cámara se desencadenó todo el alboroto.

Todos hablaron a la vez, algunos claramente querían llamar a Neferet y Kalona para que volvieran, estaban enfadados con que se hubieran ido. Nadie, ningún vampiro hablaba contra ellos. Y cuando se referían a él, le llamaban Erebus.

-“Le creen” – dijo Stark.

Asentí. Me dedicó una mirada afilada.

-“¿Tú le crees?” – Abrí la boca, sin estar segura de cómo explicar a mi Guerrero que no creía mucho en Kalona, pero estaba empezando a pensar en lo que él había sido una vez y en lo que se podría convertir de nuevo. La voz de Duantia resonó por la cámara, callando a todos.

-“¡Es suficiente! Esta sesión se aclarará inmediatamente. No nos desintegraremos en la multitud caótica”. – los Guerreros parecían materializarse entre la multitud y los stills animaban a los vampiros a empezar a salir. – “Zoey Redbird, hablaremos contigo mañana. Trae tu círculo aquí al anochecer. Entendemos que la novata-transformada-en-humana profetisa ha experimentado el trauma de una Imprenta rota hoy. Si se ha recuperado lo suficiente, se unirá a vuestro grupo mañana”.
-“Sí, señora” – dije. Stark y yo hicimos una salida rápida. Damien nos hizo señas para que fuéramos al pequeño jardín de al lado que estaba cerca del camino principal donde el resto de los niños estaban esperándonos.

-“¿Qué ha pasado ahí?” – Damien no se detuvo antes de entenderlo. – “Sonaba como si te creyeras lo de Kalona cayendo del lado de Nyx”.

-“Tengo que decirles la verdad” – respiré profundamente y les dije lo demás – “Kalona me enseñó una visión del pasado, y en ella vi que era el Guerrero de Nyx”.

-“¡Qué!” – Stark estalló – “¿el Guerrero de la Diosa? ¡Eso es demente! Estuve con él una temporada. Una temporada en la que no actuaba alrededor de mí. Vi quién es, y no es el Guerrero de la Diosa”.

-“Ya no” – intenté mantener la calma en mi voz, pero quería devolverle el grito a Stark. Él no había visto la visión. ¿Cómo podía juzgar si era o no verdad? – “Eligió dejar a Nyx. Y sí, fue un error. Y sí, hizo cosas terribles”. Dije todo eso.

-“Pero le crees” – dijo Stark, dijo lleno de rabia.

-“¡No! No me creo que sea Erebus. Nunca dije eso”.

-“No, Zo, pero lo que dijiste hizo que parezca que podrías estar a su lado si él rompiera con Neferet” – dijo Heath. Había tenido suficiente. Como siempre, estos niños me provocaban dolor de cabeza.

-“¿Creéis que vosotros dos podríais dejar de mirarlo como si fueseis mis novios? ¿Podríais dejar los celos y la posesividad e intentar ser objetivos sobre él?”

-“No estoy celoso ni soy posesivo contigo, y creo que estás equivocada si empiezas a creer que Kalona es bueno” – dijo Damien.
-“Te tiene, Z” – dijo Shaunee.

-“Sí, definitivamente su encanto te ha destruido” – concordó Erin.

-“¡No, no lo ha hecho! ¡No me he pasado al Equipo Kalona! Todo lo que estoy haciendo es intentar ver la verdad. ¿Y si la verdad es que solía estar en el lado bueno? ¡Quizá pueda volver a encontrar el lado bueno para vivir otra vez!” – Stark estaba sacudiendo la cabeza. Me volví hacia él. – “Pasó contigo, así que, ¿cómo puedes estar tan seguro de que no puede pasar con él?”

-“Está utilizando tu lazo con A-ya para confundirte. Piensa con claridad, Zoey” – sus ojos me pedían que le escuchara.

-“Eso es lo que he estado intentando hacer, pensar con claridad y encontrar la verdad, sin las posturas de nadie más, incluyendo la de A-ya, sin obstáculos. Como hice por ti”.

-“¡No es lo mismo! Yo no fui malvado durante siglos. No convertí a una tribu entera de gente en sus esclavos ni violé a sus mujeres” – dijo Stark.

-“¡Ibas a violar a Becca si Darius y yo no te hubiéramos detenido!” – solté las palabras antes de que mi sentido común pudiera pararlas. Stark retrocedió un paso de mí como si le hubiera pegado.

-“Lo ha hecho. Se ha metido en tu cabeza, y con él ahí, no hay espacio para tu Guerrero” – Stark se dio la vuelta y desapareció entre las sombras. No me di cuenta de que estaba llorando hasta que sentí la humedad caer de mi barbilla a mi camiseta. Me sequé las lágrimas con una mano temblorosa. Entonces miré al resto de mis amigos.

-“Cuando Stevie Rae volvió, era tan horrible que casi no la reconocí. Era aterradora, y malvada, y mala. Muy mala. Pero no le di la espalda. Creí en su humanidad, y se le devolvió porque no me rendí” – dije.

-“Pero, Zoey, Stevie Rae era buena antes de morir y volver. Todos sabemos eso. ¿Y si la verdad es que Kalona nunca ha tenido ninguna bondad ni humanidad que perder? ¿Y si su elección siempre ha sido el mal?” – preguntó Damien en voz baja.

-“Para vosotros es fácil decir eso, lo que os enseñó parecía real, pero al menos tenéis que considerar que la visión podría no haber sido nada más que humo y espejos. Podría haber estado enseñándonos la verdad, pero disfrazada, una parte de la verdad. He estado considerando eso” – dije.

-“Como Stark dijo, ¿de verdad has pensado que la conexión en el alma que tienes con A-ya y las memorias que has tenido sobre ella podrían estar nublando tu juicio?” – preguntó Erin. Asentí, llorando más fuerte. Heath cogió mi mano.

-“Zo, su hijo favorito mató a Anastasia y casi mató a esos otros niños que se enfrentaron a él”.

-“Lo sé” – sollocé. Pero, ¿y si sólo les dejó hacerlo porque Neferet quería? No dije las palabras en voz alta, pero Heath pareció leer mi mente.

-“Kalona está intentando ponerte a su favor porque eres la única que tuvo la fuerza para unir a todos y echarle de Tulsa” – dijo Heath.

-“Y la visión de Afrodita enseña que eras la única que tiene la fuerza para derrotarle permanentemente” – dijo Damien.

-“Una parte de ti fue creada para destruirle” – dijo Shaunee.

-“Y la misma parte fue creada para amarle” – dijo Erin.

-“Tienes que recordar eso, Zo” – dijo Heath.

-“Creo que necesitas hablar con Afrodita” – dijo Damien. -“Voy a despertarla y a traer a Darius también. Vamos a hablar sobre esto. Tienes que describir exactamente lo que Kalona te enseñó en esa visión” – asentí, pero sabía que no podía hacer lo que querían que hiciera. No podía hablar con Afrodita y Darius. No cuando me sentía tan incomprendida.

-“Vale, pero necesito un minuto” – me sequé la cara con mi manga. Jack, que había estado viendo todo con los ojos grandes y preocupados, abrió su bolso y me tendió un pequeño paquete de Kleenex de viaje. – “Gracias” – gimoteé.

-“Quédatelo. Probablemente llorarás después” – dijo, dándome palmaditas en el hombro.

-“¿Por qué no subís a la suite de Afrodita? Yo iré en un momento”.

-“No tardes mucho, ¿vale?” – dijo Damien. Asentí y mis amigos se alejaron lentamente. Miré a Heath. – “Tengo que estar sola”.

-“Sí, me lo figuraba, pero quería decirte algo” – me cogió por los dos hombros y me hizo mirarle a los ojos – “Tienes que luchar con esta cosa que sientes por Kalona, y no digo eso porque estoy celoso o lo que sea. Te he querido desde que éramos niños. No voy a abandonarte. No voy a darte la espalda, no importa lo que digas o hagas, pero Kalona no es como Stevie Rae o Stark. Es inmortal. Es de otro tipo de mundo, y Zo, yo he captado sus ondas de ‘quiero manejar el mundo’. Eres la única que puede detenerle, así que él quiere ponerte de su parte. Entra en tus sueños. Entra en tu mente y, hay parte de él que está conectada a tu alma. Entiendo eso porque yo también estoy conectado a tu alma.” – estar sola con Heath me estaba tranquilizando. Era tan familiar. Era mi soporte humano, siempre estaba ahí, siempre defendiendo lo que era mejor para mí.

-“Siento haberte llamado celoso y posesivo” – me soné la nariz. Él sonrió.

-“Yo también. Pero siempre sé que lo que tenemos tú y yo es especial” – señaló con la barbilla a la dirección por la que Stark se había ido – “Tu novio Guerrero no tiene tanta confianza como yo”.

-“Sí, bueno, no tiene tanta experiencia de Zoey como tú” – su sonrisa se ensanchó.

-“¡Nadie la tiene, nena!” – suspiré y le abracé con fuerza.

-“Eres como mi hogar para mí, Heath”.

-“Eso es lo que siempre seré, Zo” – me devolvió el abrazo y me besó suavemente – “Vale, voy a dejarte sola porque todavía tienes mocos y lágrimas. Y mientras te limpias, ¿qué te parece si localizo a Stark, le digo que es un estúpido celoso, y quizá le pego?”

-“¿Pegarle?” – Heath se encogió de hombros.

-“Un buen puñetazo hace que los chicos se sientan mejor”.

-“Uh, no si lo reciben en lugar de darlo” – dije.

-“Bien. Entonces encontraré otra persona para pegar” – alzó las cejas – “Porque, ¿no querrás que mi preciosa cara se estropee, no?”

-“Si le encuentras, ¿le llevarías a la habitación de Afrodita?”

-“Eso planeaba” – dijo. Entonces me desordenó el pelo – “Te quiero, Zo”.

-“Y yo a ti, pero de verdad odio que me desordenes el pelo” – dije. Me sonrió sobre su hombro, me guiñó el ojo y fue detrás de Stark.

Me sentía un poco mejor. Me senté en el banco, me soné la nariz otra vez, me sequé los ojos y miré a lo lejos. Entonces me di cuenta de qué miraba y dónde estaba sentada.

Era el banco de uno de mis primeros sueños de Kalona.

Estaba en un montículo así que desde ahí podía mirar sobre la enorme pared que rodeaba la isla y ver, en la distancia, la iluminada Plaza de San Marco que parecía un mágico país de las maravillas en la noche invernal. A mi espalda estaba el Palacio de San Clemente, encendido y brillante. Alrededor del palacio a mi derecha estaba la antigua catedral transformada en la Cámara del Alto Consejo. Toda esta belleza, todo este poder y majestuosidad estaba a mi alrededor y yo había estado demasiado ensimismada para verla. Quizá también estaba demasiado concentrada en Kalona. Sabía lo que iba decir Afrodita. Diría que estoy haciendo realidad la visión mala. Puede que tenga razón. Levanté la cabeza y miré a la noche, intentando ver la luna a pesar de las capas de las nubes que la ocultaban. Y entonces recé.
-“Nyx, te necesito. Creo que estoy perdida. Ayúdame por favor. Por favor, enséñame algo que me ayude a aclararme. No quiero estropearlo todo… otra vez…”

CAPITULO 38 - Tempted (TENTADA)

ZOEY

“¡Stevie Rae! ¿En verdad estas bien?” Apreté el celular en mis manos, deseando que pudiera teletransportarme hasta Tulsa y pudiera ver con mis propios ojos que mi mejor amiga estaba viva y sana.
“¡Z! Suenas muy preocupada. ¡No lo estés! Estoy bien, lo prometo. Fue un tonto accidente. Diosa, soy una tonta.”
“¿Qué pasó?”
“Pues, salí tarde de la Casa de la Noche. Soy tan estúpida. Debí de haberme quedado aquí y esperar hasta mañana para ir a los túneles. Pero de cualquier manera fui. Y después, escucha esto— ¡creí escuchar a alguien en el techo! Así que subí rápido porque estaba a punto de amanecer y pensé que tal vez algún novato rojo estaba atrapado. Diosa, necesito checarme los oídos. Era un gato. Un gran, gordo y calicó gato maullando en el techo. Pero cuando ya me iba, como cualquier no porrista y con lo descoordinada que soy, me caí y me pegué tan duro en la cabeza que me desmayé. No me creerías toda la sangre que había. Totalmente horrible. ”
“¿Te noqueaste a ti misma en el techo? ¿Justo antes del amanecer?” Quería meterme al teléfono y ahorcarla.
“Sí, yo sé. No es lo más inteligente que he hecho. Especialmente porque me desperté con el sol brillando encima de mí.”
“¿Te quemaste?” Mi estómago se revolvió. “Quiero decir, ¿estás todavía, uh, lastimada?”
“Bueno, sí, me empecé a quemar, y muy probablemente eso me despertó. Y todavía estoy bastante bronceada. Podría haber sido peor. Por suerte, tuve tiempo de correr a ese árbol que está al lado del techo. ¿Te acuerdas de él?”
Conocía muy bien ese árbol. Había escondido algo que casi me mata. “Sí, lo recuerdo”
“Así que salté al árbol, me deslicé hacia abajo, e hice que la tierra se abriera un poco para hacer una pequeña cueva que me cubriera.”
“¿Ahí fue donde te encontró Lenobia?”
“Sí, Lenobia y Erik. Por cierto, él se portó muy amable. No es que debas volver a salir con él, pero pensé que te gustaría saberlo.”
“Okay, bueno, que bueno. Me alegro de que estés a salvo.” Hice una pausa, no estaba segura de cómo decir la siguiente parte. “Uh, Stevie Rae, Afrodita la ha pasado muy mal. Con lo de la imprenta rota y todo eso.”
“Lamento mucho si la lastimé.”
“¡Lastimarla! ¿Estás bromeando? Pensamos que se iba a morir. Se estaba quemando contigo, Stevie Rae.”
“¡Ay, mí Dios! No lo sabía.”
“Stevie Rae, espérame un segundo.” Me volteé y me alejé de todos los demás que intentaban escuchar mi conversación, y entré a un hermoso y grande vestíbulo. Candelabros de cristal con velas de verdad daban una cálida luz a la tapicería de tonalidades doradas y crema, haciéndome sentir como Alicia en el País de las Maravillas hablando por una cueva de un conejo hacia otro mundo. “Okay, así está mejor. Menos oídos aquí afuera,” continué. “Afrodita dice que estabas atrapada. Estaba muy segura de eso.”
“Z, me tropecé y me golpeé la cabeza. Estoy segura de que Afrodita captó mi miedo. O sea, cuando me desperté me estaba quemando. Además, me caí encima de mucho fierro y metales y estaba toda enredada en eso. Y te digo que realmente me asuste. Muy probablemente fue lo que ella sintió.”
“¿Así que nadie te atrapó? ¿No estabas encerrada o algo así?”
“No, Z,” ella se rió. “Esto es una locura. Aunque sería una mejor historia en lugar de que me hubiera tropezado con mis propios pies.”
Moví mi cabeza, aún incapaz de creer todo. "Me asustaste Stevie Rae. Por un momento pensé que iba a perderlas a ambas.”
"Todo está bien. No me vas a perder ni a mí ni a dolor-en-el-trasero Afrodita. Aunque no te voy a negar que estoy muy contenta que la imprenta se haya roto"
"Okay, esa es otra parte muy rara. ¿Cómo paso? Su imprenta no se rompió ni siquiera cuando Darius bebió de Afrodita, y tú sabes que tienen una cosa entre ellos."
"Lo único que se me ocurre es que estuve mucho más cerca de morir de lo que me imaginaba. Muy probablemente eso deshizo nuestra imprenta. Además no es como si nos encantara estar juntas. Tal vez lo de la cosa con Darius había debilitado la imprenta."
"Te aseguro que la imprenta entre ustedes dos no parecía débil" dije.

"Bueno pues desapareció, así que al final de todo parece que nuestra imprenta fue muy sencilla de deshacer."
"Desde mi punto de vista no parecía nada fácil." dije.
“Bueno, pues desde la perspectiva de la chica quemándose en el sol, te puedo decir que aquí tampoco me fue tan fácil,” ella dijo.
Instantáneamente me sentí mal por la manera en la que le había estado haciendo preguntas. Estuvo a punto de morirse (Por Dios), y aquí estaba yo, interrogándola por los detalles. “Hey lo siento. Es que estaba muy preocupada, eso es todo. Y fue horrible ver a Afrodita experimentar tu dolor.”
“¿Debería hablar con ella?” Stevie Rae preguntó.
“Uh, no. Por lo menos ahora no. La última vez que la vi, Darius la llevaba cargando por una escalera hacia lo que sonaba como una grande y cara suite para que pudiera descansar un rato con las drogas que los vampiros le dieron.”
“Oh, Dios. Le dieron medicamentos. Eso le va a gustar.”
Nos reímos, y se sintió como si todo fuera normal de nuevo.
“¿Zoey? El Alto Consejo está llamando a sesión. Necesitas ir,” La voz de Erce sonó por el pasillo.
“Necesito hacerme cargo de algunas cosas,” le dije a Stevie Rae.
“Sí, ya escuché. Hey, te quería decir algo que es muy importante que recuerdes. Sigue a tu corazón, Z. Incluso aunque parezca que todos los demás están en tu contra, y que tal vez estés echando a perder todo. Escucha lo que te dice tu interior. Lo que suceda, te puede sorprender,” Stevie Rae dijo.
Dudé un poco pero dije lo primero que se me vino a la mente. “¿Y eso podría salvar tu vida?”
“Sí,” respondió. “Podría.”
“Necesitamos hablar cuando regrese a casa.”
“Estaré aquí,” me dijo. “Patea unos cuantos traseros, Z”
“Lo intentaré,” dije. “Bye, Stevie Rae. Me alegra que no estés muerta. Otra vez.”
“Sí, yo también. Otra vez.”
Colgamos. Inhale fuertemente, cuadré mis hombros, y me alisté para enfrentarme al Alto Consejo.
El Alto Consejo se reunía en una catedral muy antigua que se encontraba justo al lado del palacio de San Clemente. Era obvio que tiempo atrás había sido una iglesia católica, y me pregunté qué pensaría la hermana María Ángela de cómo los vampiros la habían cambiado. Habían desmantelado todo el lugar, a excepción de las enormes luces fijadas que colgaban desde el techo en cadenas de bronce, haciéndolo ver como algo que estaba suspendido mágicamente en el aire encima de las mesas de Hogwarts. Habían construido asientos circulares en niveles en un estilo que recordaba haber estudiado cuando leímos Medea. En el piso de granito, siete sillas de mármol se encontraban una al lado de la otra. Pensé que se eran muy bonitas, pero parecía que harían que tu trasero se te durmiera o que te congelaras.
Las ventanas originales con vidrio de muchos colores habían sido cambiadas de un Jesús ensangrentado y un montón de santos católicos a una imagen representativa de Nyx, con las manos alzadas sosteniendo una luna creciente entre sus manos, un brillante pentagrama al lado de ella. En la otra ventana en vidrios de colores vi la versión de los cuatro emblemas que simbolizaban cada año de los novatos en la Casa de la Noche. Estaba mirando alrededor en la catedral, pensando en que bonitas eran las ventanas, cuando noté una escena pintada directamente al otro lado de la imagen de Nyx—y sentí como si todo mi cuerpo se hubiera congelado.
¡Era Kalona! Las alas completamente extendidas, su pecho desnudo, musculoso, bronceado y poderoso. Sentí que todo mi cuerpo empezó a temblar.

Stark tomó mi brazo y lo entrelazó con el suyo, como si fuera un caballero guiando a su dama bajando las escaleras del anfiteatro hacia nuestros lugares casi hasta abajo. Pero su toque era fuerte y seguro, y me susurró, "No es el. Es solo una antigua representación de Erebus, igual que el símbolo de Nyx que está por allá."
“Pero se parece lo suficiente como para que crean que Kalona es Erebus,” le susurré frenéticamente a Stark.
“Tal vez. Y es por eso que tú estás aquí,” murmuró.
“Zoey y Stark, estos lugares son para ustedes.” Erce señaló unos asientos hasta el frente y justo al lado de las siete sillas. “El resto de ustedes se pueden sentar en la fila de allá atrás.” Acomodó a Damien, Jack y a las gemelas unas cuantas filas atrás de nosotros diciendo, “Recuerden, solo pueden hablar si el consejo los reconoce,” Erce dijo.
“Sí, sí, lo recuerdo,” dije. Había algo acerca de Erce que me molestaba. Okay, ella era amiga de Lenobia, y deseaba que me cayera bien, pero desde que Afrodita sufrió su ataque de pánico ella se metió en nuestros asuntos y empezó a actuar como si fuera la jefa de todos nosotros. Yo le había insistido a Darius que se quedara con Afrodita, así que básicamente observe sin decir nada todo lo que Erce mencionaba acerca de las reglas del Alto Consejo, y lo que no debía de hacer. Okay, un ángel caído y una mentirosa ex-Alta Sacerdotisa trataban de manipular al Alto Consejo Vampírico. ¿No era mucho más importante desenmascararlos, que tener modales?
Claro que, Damien, Jack y las gemelas accedieron con inocentes, e intimidados “okays.”
“Voy a estar aquí atrás al lado de Damien y Jack. No siento el amor por los humanos en este lugar, así que prefiero pasar desapercibido,” Heath dijo.
Vi que Stark cruzó una mirada con él. “Cuida su espalda,” él dijo.
Heath asintió. “Siempre la estaré cuidando.”
“Bien, yo me enfocaré en todo lo demás,” Stark dijo.
“De acuerdo,” Heath dijo.
Y no estaban bromeando. No estaban siendo sarcásticos o hablando en un tono tipo-chico-posesivo. Ellos realmente estaban preocupados, tanto, que hasta estaban trabajando juntos.
Eso me hizo muy, muy paranoica.
Sabía que era ridículo e inmaduro, pero extrañaba mucho a mi abuela. Deseaba estar acurrucada en su pequeña casita en el rancho de lavanda en Oklahoma, comiendo palomitas con mucha mantequilla, viendo un maratón de musicales y que lo peor de lo que me pudiera preocupar fuera de cómo no entendía geometría.
“¡El Alto Consejo Vampírico!”
“¡Recuerden ponerse de pie!” Erce me susurró sobre mi hombro.
Suprimí rodar mis ojos. Hubo un absoluto silencio en el gran salón. Me paré junto con todos los demás, y después mire boquiabierta mientras siete de las criaturas más perfectas que había visto en mi vida entraban al salón.
Todo el Alto Consejo eran mujeres, pero eso ya lo sabía. Nuestra sociedad era matriarcal, así que las personas que formaran parte del consejo debían ser mujeres. Sabía que eran muy viejas, incluso para los vampiros. Claro que no podías adivinar su edad al mirarlas. Todo lo que se podía ver era cuan hermosas y poderosas eran. Por un lado me dio gusto ver la prueba de que aunque los vampiros seguían creciendo, y eventualmente morían, no se veían como un Shar-Pei lleno de arrugas. Por otro lado, el sentido de poder que emitían era totalmente intimidante. El solo pensar de hablar en frente de ellas, junto con todos los demás que estaban en la catedral, oscuros, y silencioso vampiros, hizo que mi estomago se quisiera salir de mi.
Stark agarró mi mano. Y yo me aferré de la suya fuertemente, deseando que yo fuera mayor, más inteligente y francamente una mejor oradora pública.
Escuché que alguien más entraba al salón y volteé para ver a Neferet y a Kalona bajar confiadamente las escaleras y tomar dos lugares vacíos en la misma hilera e la que estábamos, solo que los de ellos se encontraban justo enfrente del Alto Consejo. Como si hubieran esperado a que llegaran, el Consejo tomo su lugar indicándonos que podíamos sentarnos, también.
Era difícil no quedarse viendo a Neferet y Kalona. Ella siempre había sido hermosa, pero en un par de días que no la había visto, ella había cambiado. El aire alrededor de ella parecía vibrar con poder. Llevaba puesto un vestido que me recordaba a la antigua Roma, flotaba como una toga. La hacía ver como una reina. A su lado Kalona se veía espectacular. Era estúpido decir que estaba medio vestido: Sólo tenía puestos unos pantalones negros-sin camisa- sin zapatos, pero no se veía estúpido. Se veía como un Dios que había decidido caminar por la Tierra. Sus alas se extendían como una capa. Sabía que los ojos de todos estaban sobre él, pero cuando me vio y nuestras miradas se cruzaron, el mundo se desvaneció y solo estábamos Kalona y yo.
La memoria de nuestro último sueño cruzo entre nosotros. Vi en él al guerrero de Nyx, a la increíble criatura que había estado al lado de ella y que después cayó porque la amaba demasiado. Y en sus ojos vi vulnerabilidad y una pregunta muy clara. El quería saber si podía creer en él. En mi mente escuchaba sus palabras: ¿Qué pasa si sólo soy malo con Neferet? ¿Qué pasa si la verdad es que si estuviera contigo podría elegir el bien?
Mi mente escuchó esas palabras y las volvió a rechazar. Pero mi corazón, era otra cosa. Él había tocado mi corazón, y aunque tuviera que negarlo—pretender que no me había atrapado— en ese momento quería que viera la verdad en mis ojos. Así que le abrí mi corazón y dejé que mis ojos le dijeran que sabía que yo nunca podría.
La respuesta de Kalona fue una sonrisa tan gentil, que tuve que alejar mi mirada rápidamente.
“¿Zoey?” Stark susurró.
“Estoy bien,” le dije automáticamente.
“Sé fuerte. No dejes que te atrape.”
Asentí. Sentí que la gente volteaba a verme con mayor curiosidad de lo acostumbrado debido a mis tatuajes. Miré sobre mi hombro, y vi a Damien, Jack y a las gemelas mirando boquiabiertos a Kalona. Después me encontré con la mirada de Heath. Él no estaba viendo a Kalona. Me estaba viendo a mí, obviamente preocupado. Traté de sonreírle, pero sentí que más bien fue una mueca de culpabilidad.
Después un miembro del Consejo habló, y me sentí aliviada de enfocar mi atención en ella.
“El Alto Consejo es convocado a esta sesión especial. Yo, Duantia, los llamó a orden. Que Nyx nos dé su sabiduría y guía.”
“Que Nyx nos dé su sabiduría y guía,” dijeron el resto de las personas en el salón.
Cuando Erce nos menciono algunas de las reglas e instrucciones, nos dijo los nombres de los miembros del Consejo, y las describió a una por una, y gracias a ella sabía que Duantia era la más grande del consejo, así que era su trabajo llamar a orden y decidir cuando tenía que acabar la sesión. Fijé mi mirada en ella. Era increíble que tuviera unos cuantos cientos de años, y a excepción de la gran confidencia y poder que demostraba, la única señal de su edad era que su cabello café tenía una mezcla con tonalidades grises.
“Tenemos más preguntas para Neferet y para el ser que se llama a sí mismo Erebus.” Vi a Neferet entrecerrar muy ligeramente sus ojos verdes, sin embargo asintió con gracia a Duantia.
Kalona se paró y se inclinó ante el Consejo. “Los saludo de nuevo,” dijo a Duantia y asintió ante los otros seis miembros del Consejo. Algunas de ellas asintieron en respuesta.
“Tenemos preguntas sobre tus orígenes,” Duantia dijo.
“Es natural que las tengan,” Kalona dijo.
Su voz sonaba profunda y rica. Él sonaba humilde, razonable y muy, muy honesto. Pensé que yo, junto con la mayoría de los presentes, queríamos escucharlo, creyéramos o no creyéramos lo que estaba a punto de decir.
Y después hice algo que era tonto y totalmente inmaduro. Como si fuera una pequeña niñita, cerré los ojos e hice una oración a Nyx con una fuerza con la que nunca había orado en mi vida entera. Por favor permite que hable solo con la verdad. Si dice la verdad, tal vez haya esperanza para él.
“Dices que eres Erebus venido aquí a la Tierra,” Duantia dijo.
Abrí mis ojos para ver a Kalona sonreír y responder, “Soy, de hecho, una criatura inmortal”
“¿Eres Erebus, el consorte de Nyx?”
¡Di la verdad! Grité en mi cabeza. ¡Di la verdad!
“Estuve al lado de Nyx. Después caí a la Tierra. Y ahora estoy aquí al—”
“Al lado de la Diosa misma encarnada,” Neferet interrumpió mientras se paraba al lado de Kalona.
“Neferet, ya sabemos tu punto de vista con respecto a quién es este inmortal,” Duantia dijo. Ella no alzó la voz, pero sus palabras eran afiladas, con una advertencia muy clara. “Lo que queremos, es escuchar más cosas por palabras del inmortal mismo.”
“Como cualquier consorte, me inclino ante my dama,” Kalona dijo, inclinándose un poco ante Neferet quien le dio una sonrisa triunfante que me hizo apretar mis dientes.
“¿Esperas que creamos que la encarnación de Erebus en esta tierra no tiene voluntad propia?”
“Sea en la Tierra o en el reino mismo de Nyx, Erebus está dedicado a su dama, y su deseo se reflejan en ella. Les puedo decir que conozco la verdad de estas palabras por experiencia propia.,” Kalona dijo.
Y él estaba diciendo la verdad. Como guerrero de Nyx había visto la dedicación de Erebus hacia su diosa. Claro que, en la manera en la que lo decía, hacía parecer que el realmente era Erebus—sin realmente decir una mentira.
Pero ¿No era eso por lo que había rogado que hiciera? ¿Que solo hablara con la verdad?
“¿Por qué dejaste el reino de Nyx?” preguntó otro miembro del consejo, una que no le había asentido en señal de bienvenida.
“Caí.” Kalona miró del Consejo hacia mí, y dijo el resto de su respuesta como si solo él y yo estuviéramos en el salón. “Escogí irme porque creí que ya no servía correctamente a mi Diosa. Al principio parecía como si hubiera cometido un terrible error, pero después me levanté en la Tierra y encontré un nuevo reino y una nueva dama. Después empecé a creer que en realidad podía servir a mi Diosa otra vez, nada más que en esta ocasión sería mediante su representante en la Tierra.”
Las cejas de Duantia se arquearon con gracia mientras seguía la mirada de Kalona, la cual descansaba sobre mí. Sus ojos se entrecerraron un poco. “Zoey Redbird. El Consejo te reconoce.”

CAPITULO 37 - Tempted (TENTADA)

STEVIE RAE



La tierra se la trago, y por un momento parecía que todo iba a ir bien. La fría oscuridad fue un alivio para su piel quemada, y gemía suavemente.
"¿Roja? ¿Stevie Rae?"
No fue hasta que él hablo que se dio cuenta de que estaba encerrada en los brazos de Rephaim. Se desenvolvió de él y se alejo, para gritar de dolor mientras su espalda tocaba la pared de barro que su elemento había abierto para protegerla, y luego volvió a caerse.
"¿Estás bien? Yo-yo no puedo verte" dijo Rephaim.
"Estoy bien. Creo." Su voz la sorprendió. Sonaba tan débil, tan fuera de lo normal que fue el primer indicio de que a pesar de que había escapado del sol, no había escapado de sus efectos.
"No puedo ver nada." dijo.
"Eso es porque la tierra se sello sobre nosotros para protegerme del sol."
"¿Estamos atrapados aquí?" su voz no era de pánico, pero no era exactamente de calma tampoco.
"No, puedo hacer que salgamos cada vez que quiera." explico. Luego pensándolo bien añadió "Y bueno la tierra sobre nosotros no es muy profunda. Si me muero puedes cavar fácilmente. ¿Como estas? Esa ala realmente debe dolerte."
"¿Te sientes como si pudieras morir?" pregunto, ignorando la pregunta acerca de su ala.
"No lo creo. Bueno, en realidad, no lo sé. Siento algo divertido."
"¿Divertido? Explícate."
"Como si no estuviera muy unida a mi cuerpo."
"¿Tu cuerpo está herido?"
Stevie Rae pensó en ello y se sorprendió por lo que descubrió. "No, En realidad no me duele nada." Era extraño, sin embargo, que su voz se oía cada vez más débil.
De repente, su mano estaba tocando su rostro, deslizándose por el cuello y los brazos y-
"¡Ay! me haces daño."
"Estas gravemente quemada. Puedo sentirlo. Necesitas ayuda."
"No puedo salir de aquí o voy a terminar quemada." Dijo, preguntándose porque la tierra parecía estar dando vueltas bajo ella.
"¿Que puedo hacer para ayudarte?"
"Bueno, puedes conseguir una gran lona o algo, y ponerla encima de mí, mientras me llevas al banco de sangre. Eso suena muy bien ahora." Stevie Rae estaba allí, pensando que nunca había sentido tanta sed en su vida. Se pregunto, independientemente de la curiosidad, si de verdad iba a morir. Le pareció vergonzoso, después de todo lo que había pasado Rephaim para ayudarla.
"¿Sangre es lo que necesitas?"
"Sangre es todo lo que necesito. Es lo que me hace estar marcada, que es más que un poco grave, pero aun así. Es la verdad. Estaca mi corazón y ayúdame a morir." se rio un poco histéricamente, y luego se puso seria. "Espera, esto no es muy divertido."
"Si tu no consigues sangre, ¿Vas a morir?"
"Creo que podría." Dije, encontrando dificultades para decirlo.
"Entonces si la sangre te sanará, toma la mía. Te debo la vida. Por eso te salve ahí arriba, pero si te mueres aquí, morirás sin haber pagado mi deuda. Así que si tú necesitas sangre, toma la mía," repitió.
"Pero tú no hueles nada bien." dije abruptamente.
En la oscuridad parecía irritado y ofendido. "Eso es lo que los novatos rojos dicen, también. Mi sangre no huele bien para ti, porque no estoy destinado a ser una de tus presas. Yo soy el hijo de un inmortal. No tu víctima."
"Hey, yo no tengo victimas; nunca más." proteste débilmente.
"Eso no cambia nada. Huelo diferente para ti porque soy diferente. No fui creado para ser tu almuerzo."
"Yo nunca dije que lo fueras." Ella quería que sus palabras salieran a la defensiva y un poco irritables. En vez de eso, su voz era débil, y su cabeza se sentía extrañamente enorme, como si fuera a estallar encima de su cuello en cualquier momento y flotar por el suelo y en las nubes como un globo de cumpleaños gigante.
"Huela bien o no, es sangre. Te debo la vida. Así que tienes que beber, y vivirás."
Stevie Rae grito cuando la mano de Rephaim la encontró de nuevo y él la apretó contra su cuerpo. Sentía la piel de sus brazos y hombros quemados y mezclados con tierra. Entonces ella estaba descansando en la suavidad de sus plumas. Suspiro profundamente. No estaría mal morir aquí en la tierra, en un nido de plumas. Mientras no se moviera, ni siquiera dolería mucho.
Sintió que Rephaim se movía, sin embargo. Y se dio cuenta que con el pico había reabierto la herida que le había hecho Kurtis en el bíceps. Había dejado de sangrar, pero esta nueva laceración de inmediato se puso a desbordarse, llenándolo todo del aroma de la sangre escarlata de un inmortal.
Luego cambio de nuevo y de repente su brazo sangrante estaba presionando contra sus labios.
"Bebe," dijo con dureza. "Ayúdame a librarme de esta deuda."
Bebió, de forma automática al principio. Su sangre, después de todo, era apestosa. Había olido mal, mal, mal.
Luego la toco con la lengua. Su sabor no se parecía a nada que Stevie Rae podía haber imaginado. No era como su olor, no era nada remotamente como su olor. En su lugar, le sorprendió, llenando su boca y su alma con su rica complejidad, con una diferencia absoluta respecto a cualquier cosa que hubiera probado antes.
Le oyó resoplar, y la mano que había estado en la parte posterior de su cuello, la empujo más hacia él. Stevie Rae gimió. Beber de un cuervo Mocker no podía ser una experiencia sexual, pero no era exactamente una experiencia sexual, tampoco. Stevie Rae tuvo el pensamiento fugaz de que hubiera deseado tener alguna experiencia con los chicos - otros que no fueran con Dallas en la oscuridad - porque no sabía que pensar de todo lo que estaba pasando por su mente y el aumento en su cuerpo. Se sentía bien, todo caliente y con un hormigueo poderoso, pero nada parecido a como Dallas le había hecho sentir.
A ella le gusto, sin embargo. Y allí, por un momento fugaz, Stevie Rae olvido que Rephaim era una mezcla entre un inmortal y una bestia, creado a partir de la lujuria y la violencia. Pero en ese momento, ella solo conocía el placer de su tacto y la fuerza de su sangre. Fue entonces cuando su imprenta con Afrodita se destrozo y Stevie Rae, la primera Sacerdotisa vampiro rojo de Nyx, estuvo impresa con Rephaim, el hijo favorito de un inmortal caído.
También fue entonces cuando rompió el control sobre su cabeza y se alejo de él. Ninguno de los dos dijo nada. El silencio en la habitación pequeña estaba solo ocupado por los sonidos de ambos sin aliento.
"Tierra, te necesito de nuevo." Stevie Rae hablo en la oscuridad. Su voz sonaba normal. Su cuerpo herido. Podía sentir sus quemaduras y la crudeza de su piel, pero la sangre de Rephaim le había permitido empezar a curar, y entendió muy bien que había estado a punto de morir.
La tierra vino a ella, llenando su espacio con los olores de un prado en primavera. Stevie Rae apunto hacia arriba, a un lugar tan lejos de sí misma como pudo. "Abre una grieta allí - lo suficiente para dejar entrar la luz, pero no para quemarme."
Su elemento cumplió. La tierra se estremeció por encima de ellos, la suciedad cayendo por partes, se abrió dejando una pequeña grieta de luz.
Los ojos de Stevie Rae se adaptaron casi al instante, por lo que vio a Rephaim parpadear con sorpresa, mientras trataba de adaptarse a la luz repentina. Estaba sentado junto a ella. Tenía un aspecto terrible- sangriento y golpeado. Su ala rota estaba totalmente suelta de la venda de toalla que había hecho para él y estaba indefenso por la espalda. Ella supo al instante que su visión se había despejado. Sus ojos humanos, se tiñeron de rojo escarlata, y la miraron.
"Tu ala está mal de nuevo," dijo.
El gruño, y ella pensó que era su palabra de chico que estaba de acuerdo con ella.
"Sera mejor que la coloque de nuevo." empezó a levantarse y una mano la detuvo.
"No debes moverte. Solo quédate contra tu tierra y recupera tu fuerza."
"No, está bien. No estoy al cien por cien, pero lo estoy haciendo mucho mejor." vacilo y luego agrego. "¿No dijiste eso?"
"Como podría yo -" las palabras del cuervo Mocker, pararon abruptamente. Stevie Rae vio que sus ojos aumentaban comprendiendo. "¿Cómo es posible?" dijo él.
"No lo sé," dijo ella, empezando a deshacer la desordenada venda a su alrededor. "No creía que fuera posible. Pero, bueno, aquí estamos, y aquí esta."
"Una imprimación." dijo él.
"Entre nosotros." dijo ella.
Entonces ninguno de los dos dijo nada.
Cuando tuvo el vendaje enderezado, le dijo a él. "Okey, voy a volver a ponerte el ala como debería y volver a envolvértelo. Perdón. Aunque por supuesto esta vez me dolerá a mí, también."
"¿De veras?" dijo.
"Sí, bueno, se cómo funciona esto de la imprenta porque antes estaba impresa con una humana. Ella sabía todo tipo de cosas sobre mí. Ahora estoy impresa contigo, así que es lógico que sepa cosas sobre ti, lo que incluye cuando sufres un dolor insoportable."

"¿Todavía estas impresa con ella?"
Stevie Rae sacudió la cabeza. "Nop, se ha ido, estoy segura, porque estoy soñando en rosa."
"¿Soñando en rosa?"
"Es solo una expresión que decía mi mamá. Significa que está feliz de no estar impresa mas."
"¿Y tú? ¿Cómo estás?"
Stevie Rae lo miro a los ojos y respondió con honestidad. "Estoy totalmente confundida acerca de nosotros, pero no me molesta no estar impresa con Afrodita más. Ahora quieto y déjame terminar con esto." Rephaim se quedo totalmente inmóvil mientras Stevie Rae restablecía su ala. Fue ella quien jadeo con exclamaciones dolorosas. Ella era quien estaba blanca y frágil cuando todo había terminado. "Maldición, alas heridas. Grave."
Rephaim la miro sacudiendo la cabeza. "Tú lo sentías, ¿no?"
"Lamentablemente, sip, lo hice. Es casi peor que estar casi moribunda." Ella lo miro a los ojos. "¿Va a ponerse bien?"
"Se compondrá."
"¿Pero?" sintió la palabra al final de su oración.
"Pero yo no creo que pueda volar nunca más."
Stevie Rae mantuvo su mirada en el."¿Eso es malo no?"
"Así es."
"Quizás se cure mejor de lo que crees. Si tu volvieras a la Casa de la Noche conmigo, podría -"
"No puedo ir allí." no había levantado la voz, pero las palabras tenían la misma finalidad.
Stevie Rae lo intento de nuevo. "Eso es lo que yo creía, pero he vuelto y me han aceptado. Bueno, algunos lo hacen."
"No sería así para mí y tú lo sabes."
Stevie Rae miro hacia abajo. Con sus hombros caídos. "Tu mataste a la profesora Anastasia. Ella era realmente agradable. Su compañero, Dragón, está perdido sin ella."
"Hice lo que tenía que hacer por mi padre."
"Y el te abandono." dijo.
"Yo lo decepcione."
"¡Casi mueres!"
"El sigue siendo mi padre." dijo en voz baja.
"Rephaim, esta imprenta. ¿Significa algo para ti? ¿O soy solo yo quien noto el cambio?"
"¿Un cambio?"
"Bueno, sí. No podía sentir tu dolor antes, y ahora puedo. No puedo decirte lo que estas pensando, pero puedo percibir ciertas cosas de ti, como saber donde estas o lo que te está pasando incluso si estuviera muy lejos de ti. Es raro. Es diferente a lo que tenía con Afrodita, pero es definitivamente esta. ¿Notas algo diferente en tu caso?"
ÉL vacilo largo rato antes de responderle y cuando hablo sonaba confuso. "Me siento protector contigo."
"Bueno," Stevie Rae sonrió. "Tú me protegiste de morir allí."
"Ese fue el pago de una deuda. Esto es mas."
"¿Como qué?"
"Como lo enfermo que me pone pensar en lo cerca que estuviste de la muerte." admitió, su voz a la defensiva y molesto.
"¿Eso es todo?"
"No. Si. ¡No lo sé! No estoy acostumbrado a esto." El golpeo el pecho con el puño.
"¿El qué?"
"Este sentimiento que tengo hacia ti. Yo no sé cómo llamarlo."
"Tal vez podríamos llamarlo amistad."
"Imposible."
Stevie Rae sonrió. "Bueno. Zoey siempre dice que no hay nada imposible que no todo es negro o blanco."
"No se trata de negro- o -blanco, si no bien y mal. Tu y yo estamos en dos bandos opuestos de la balanza del bien contra el mal."
"Yo no creo que eso sea inmovible." dijo.
"Sigo siendo el hijo de mi padre" contesto.
"Bueno, me pregunto dónde nos deja eso."
Antes de que pudiera responder, el sonido de gritos frenéticos se escucharon por la pequeña grieta.
"¡Stevie Rae! ¿Estás ahí?"
"Es Lenobia." Dijo Stevie Rae.
"Stevie Rae!" Otra voz se unió a la profesora de equitación.
"¡Oh, mierda! Es Erik. El sabe de los caminos de los túneles. Si el baja allí, todo el infierno se abrirá."
"¿Te protegen ellos de la luz del sol?"
"Bueno, si, supongo. Ellos no querrán que me queme."
"Entonces llámalos. Deberías ir con ellos." dijo.
Stevie Rae se concentro, señalo con la mano, y la pequeña grieta en el extremo del techo de su escondite tembló y luego se hizo más grande. Stevie Rae presiono su espalda contra el suelo duro. Entonces puso su mano alrededor de la boca y dijo:
"¡Lenobia! ¡Erik! ¡Estoy aquí abajo!"
Rápidamente se inclino poniendo una mano a cada lado de Rephaim.
"Protégele por mí, tierra. No dejes que le descubran." Entonces empujo, y como el remolino de agua en el desagüe, la suciedad detrás de él se movió hacia atrás, dejando todo al cuervo Mocker cubierto a regañadientes.
"¿Stevie Rae?" la voz de Lenobia se acerco a ellos por encima de la grieta.
"Sí, estoy aquí, pero no puedo salir a menos que puedas cubrirme con una tienda de campaña o algo así."
"Nos encargaremos de eso. Quédate donde estas."
"¿Estás bien? ¿Te hace falta algo?" pregunto Erik.
Stevie rae pensó que ese algo que decía Erik era una bolsa o diez de sangre de la nevera de los túneles y de ninguna manera quería que fuera allí.
"¡No!, Estoy bien. Solo consigue algo para cubrirme del sol."
"No hay problema. Volvemos en un segundo." dijo Erik.
"No voy a ir a ninguna parte." dijo ella. Luego se volvió hacia Rephaim. "¿Qué hay de ti?"
"Me quedo aquí, escondido en este rincón. Si tú no les dices que estoy aquí. Ellos no lo sabrán."
Negó con la cabeza. "No me refiero a ahora. Por supuesto que no les diré que estas aquí. Pero, ¿A donde vas a ir?"
"No de vuelta a los túneles." dijo.
"Sí, definitivamente eso no es una buena idea. Bueno déjame pensar. Una vez Lenobia y Erik estén fuera de aquí, puedes salir bien, verdad. Los novatos rojos no pueden salir durante el día así que todos dormirán." Considerando sus opciones. Ella quería tenerlo cerca y no solo porque tenía que ayudarle a conseguir comida y cambiarle las vendas sucias, por lo que sus heridas definitivamente necesitarían un medico. Stevie Rae también era consciente de que debía mantenerlo controlado. El se curaría y se pondría fuerte, como solía ser. ¿Entonces, que haría?
Y allí estaba el pequeño detalle de que se había impreso con él, lo que significaba que era incomodo pensar en el muy lejos de ella. Era extraño pues no sintió eso mismo con afrodita...
"Stevie Rae, oigo que regresan" dijo Rephaim. "¿Donde debo ir?"
"Ah... mierda… um.... bien, necesitas un lugar cercano pero habitable. Y no vendría mal que tuviera la reputación de espeluznante para que la gente se quedara lejos, o al menos que no fuera muy visitada durante la noche." Entonces sus ojos se abrieron y ella le sonrió. "¡Lo tengo! Después de Halloween, Z y la banda y yo fuimos a un tour fantasma por Tulsa. Fue uno de esos paseos de antaño."
"¡Stevie Rae! ¿Estás aun bien allí abajo?" la voz de Erik sonó desde arriba.
"Sí, bien." grito de nuevo.
"Estamos poniendo algo así como una tienda de campaña sobre este agujero y alrededor del árbol. ¿Crees que será suficiente para sacarte?"
"Tú solo consigue un lugar cubierto para mi, puedo encargarme de la parte de salir yo solita."
“Okay, te hare saber cuando estemos listos,” él dijo.
Stevie Rae se volvió hacia Rephaim. "Así que este es mi punto. La última parada del tranvía en el museo Gilcrease. Es en el norte de Tulsa. Hay una casa en el centro que está totalmente desocupada. Siguen hablando de renovarla, pero no tienen el dinero. Puedes ocultarte allí."
"¿La gente no puede verme?"
"¡Infiernos, no! No si te quedas durante el día en la casa. Es un desastre-esta todo cerrado y bloqueado para que los turistas no entren en ella. Y aquí está la mejor parte- ¡esta súper encantada! Es por eso que estuvo en el tour de fantasmas. Al parecer el fantasma del Sr Gilcrease, su segunda esposa y hasta los niños se pasean por allí regularmente, así que si alguien ve u oye algo extraño – ósea tú – ellos se asustaran y creerán que es solo más cosas de fantasmas.
"Espíritus de los muertos."
Stevie Rae alzo las cejas. "No tienes miedo de ellos ¿verdad?"
"No. Los entiendo muy bien. Existí como un espíritu durante siglos."
"Maldición, lo siento. Casi lo olvido."
"Bueno, ¡Stevie Rae! Estamos listos aquí arriba" Lenobia llamo.
"Okay, ahora subiré. Echaros atrás sin embargo, para que no caigáis aquí cuando haga la grieta más grande." Se levanto y se acerco a la grieta en el suelo por encima de ellos, que ya casi no dejaba entrar luz. "Voy a sacarlos de aquí de inmediato. Entonces te metes en la vía del ferrocarril. Veras la autopista 244 al este - Síguelo. Gira en Ok 51. Ve hacia el norte hasta que veas la señal de salida del Museo Gilcrease - a tu derecha. Luego solo tienes que seguir ese camino y te encontraras con el museo. La parte mas difícil será entonces, porque hay un montón de arboles y cosas que ocultan ese camino. Ese es el camino con el que tendrás problemas. Solo tienes que moverte tan rápido como puedas y permanecer a un lado de la zanja. Si logras agazaparte darás la idea de que no eres más que un pájaro gigante."
Rephaim hizo un sonido de disgusto que Stevie Rae ignoro. "La casa está en medio de los jardines del museo. Ocúltate allí y te traeré comida y cosas mañana por la noche."
Él vacilo y luego dijo. "No es prudente para ti que me veas de nuevo."
"Nada de esto ha sido muy inteligente, si lo piensas bien." dijo ella.
"Entonces, probablemente te vea mañana, ya que ninguno de nosotros parece ser capaz de ser inteligente, en lo que al otro se refiere."
"Bueno, entonces, adiós hasta mañana."
"Mantente a salvo " dijo. "Si no, Yo-yo creo, que quizás, sentiría tu perdida." dudo sobre las palabras, como si no supiera cómo decirlas.
"Lo mismo para ti." dijo. Antes de levantar los brazos para abrir la tierra, añadió. "Gracias por salvarme la vida. Tu deuda está totalmente pagada."
"Es curioso que me sienta como si no estuviera libre de ella." dijo en voz baja.
"Si," dijo Stevie Rae. "Sé lo que quieres decir."
Y entonces mientras Rephaim se agazapaba dentro de la tierra, Stevie Rae pidió a su elemento, que abriera el techo de la habitación, y que dejara a Lenobia y a Erik tiraran de ella fácilmente.
Ninguno de ellos pensó en mirar detrás de ella. Nadie sospecho. Y nadie vio a una criatura, mitad cuervo, mitad hombre, cojear hacia el Museo Gilcrease a esconderse entre los espíritus del pasado.

CAPITULO 36 - Tempted (TENTADA)

ZOEY

Cuando Afrodita comenzó a gritar, Zoey sabía que sólo había una cosa por hacer.
-“¡Espíritu, ven a mí!”- Ordenó.
El espíritu llenó todo al instante con su presencia serena.
-“Ayuda a Afrodita a calmarse.”-
Sintió al elemento alejarse, y casi de inmediato los gritos de Afrodita se tranquilizaron en suspiros y sollozos.
-“Darius, necesito el número del celular de Lenobia. ¡Ahora!”-
Darius sostenía a Afrodita en sus brazos, pero obedeció a Zoey, sacando su teléfono del bolsillo de sus pantalones vaqueros y arrojándolo hacia ella.
-“Esta en los contactos.”-
Calmando sus manos para no agitarlas, Zoey busco en la lista de contactos el nombre de Lenobia. Ella respondió al instante.
-“¿Darius?”-
-“Soy Zoey. Tenemos una emergencia. ¿Dónde está Stevie Rae?”-
-“Se fue a la estación para tratar de razonar con los novatos rojos. Yo la estaba esperando, aunque, ya es casi el amanecer.”-
-“Ella esta en problemas.”-
-“¡Quemándose!”- Afrodita sollozó. -“¡Se esta quemando!”-
-“Ella esta afuera en algún lugar. Afrodita dice que está en llamas.”-
-“¡Oh, dios! ¿Puede decirte algo más?”-
Ya podía oír por el cambio en la voz de Lenobia que estaba en movimiento.
-“¿Afrodita, puedes saber donde esta Stevie Rae?”-
-“N-no. Justo en las afueras.”-
-“Ella no sabe dónde está, sólo sabe que está afuera.”-
-“Voy a buscarla,”- dijo Lenobia.
-“Llámame si Afrodita nos puede decir algo más.”-
-“Llámame tan pronto como Stevie Rae este segura,”- dije, no pudiendo considerar cualquier otro resultado.
Lenobia cortó la comunicación.
-“Llevemos a Afrodita adentro donde podamos lidiar mejor con esto,”- dijo Erce.
Nos guió desde la salida del barco a un local cerrado, sólo que estaba construcción y no pertenecía al aeropuerto. Era vieja y de piedra. Sólo tuve tiempo para aliviarme de que Stark estuviera protegido del sol cuando Darius llevaba a Afrodita desde el barco corriendo con Erce a través de un pasadizo abovedado. Stark se quedó a mi lado trotando para mantenerse a la par de Erce.
-“Afrodita imprimo con Stevie Rae que es la otra vampira roja,”- le expliqué.
Erce asintió con la cabeza, manteniendo abierta una puerta grande de madera mientras le hacia una seña a Darius para que llevara a Afrodita al interior.
-“Lenobia me habló de su imprimación.”-
-“¿Qué puedes hacer para ayudarla?”-
Entramos en un pasillo enorme. Daba la impresión de una increíble opulencia, los techos eran increíblemente altos, había arañas de cristal, candelabros, y lámparas, luego Erce se apresuró hacia nosotros a través de la sala.
-“Pónganla en el sillón de allí.”-
Rodeamos el sillón, mirando en silencio a Afrodita.
Erce se volvió hacia mí y en voz baja dijo: -“No hay nada que se puede hacer por un ser humano si su vampiro impreso esta sufriendo. Ella sentirá el dolor de Stevie Rae, hasta que la crisis haya terminado, o hasta que ella este muerta.”-
-“¿Ella?”- Chillé. -“¿Stevie Rae o Afrodita?”-
-“O ambas. Los vampiros pueden sobrevivir a los acontecimientos que matan a sus consortes.”-
-“Bueno, mierda,”- Heath murmuró.
-“¡Mis manos!”- Afrodita sollozó. -“¡Se queman!”-
No pude aguantar más y me dirigí hacia ella. Estaba en su mayor parte en brazos de Darius. El guerrero estaba sentado en el sillón, sosteniéndola con fuerza y hablando en voz baja. Su rostro estaba pálido y sombrío. Sus ojos me suplicaban que la ayudara.
Tomé una de las manos de Afrodita. Se sentía anormalmente caliente.
-“No estás en llamas. Mírame, Afrodita. No te está pasando a ti. Está sucediéndole a Stevie Rae.”-
-“Sí, ya sé cómo te sientes.”- Heath estaba a mi lado, de cuclillas sobre una rodilla y tomando la otra mano de Afrodita. -“Es un asco estar impreso y luego sentir que algo malo le sucede a tu vampira. Pero no eres tú. Se siente como si lo fuera, pero no lo es.”-
-“No se trata de Stevie Rae haciendo algo desagradable con alguien más,”- dijo Afrodita, su voz era débil y temblaba extrañamente.
Heath no se inmutó.
-“Lo que pasa no importa. Lo que importa es que te duele, y lo hace. Debes recordar que tu no eres realmente ella, aunque se sienta como si estuvieras tan apegada que eres una parte de ella.”-
Afrodita parecía pensar, y lo miró fijamente.
-“Pero yo no quería esto.”- Ella hizo un sollozo. -“Yo no quería estar conectada a Stevie Rae, y tu quieres la cosa con Zoey.”-
Heath le apretó la mano, y vi que se aferraba a él con mucha fuerza. Todo el mundo estaba observando, pero creo que fui la única que se sentía como una extraña.
-“Lo Quieras o no, a veces es demasiado. Tienes que aprender a guardar algunas cosas dentro de ti para ti misma. Tienes que saber que en realidad no compartes el alma con ella, no importa lo que digan sobre la imprenta.”-
-“¡Eso es!”- Afrodita retiró su mano de la mía y cubrió la de Heath con ella.
-“Siento como si estuviera compartiendo mi alma. Y no puedo soportarlo.”-
-“Sí, puedes. Sólo recuerda que es un sentimiento. No es real.”- Retrocedió unos pasos.

-“Afrodita, estás a salvo. Todos estamos aquí contigo.”- Damien tocó su hombro.
-“Sí, estás bien. Y tu pelo aún se ve muy bien,”- dijo Jack.
Oí reír a Afrodita, una burbuja de normalidad escapó de en medio de la increíble crisis. Y ella dijo: -“Esperen, estoy mejor de repente.”-
-“Bueno, porque no puedes morir delante de nosotros,”- dijo Shaunee.
-“Sí, necesitamos de tu experiencia en compras,”- dijo Erin.
Las Gemelas trataban de sonar indiferentes, pero era evidente que estaban preocupadas por Afrodita.
-“Afrodita estará bien. Ella logrará pasar a través de esto,”- dijo Stark.
Se había colocado a mi lado, como siempre. Era una presencia constante allí, una voz de calma en la tormenta.
-“¿Pero que está pasando con Stevie Rae?”- le susurre.
Puso su brazo alrededor de mí y me apretó.
Un hermoso vampiro con el pelo de color rojo brillante entró en la habitación, con una bandeja que llevaba una jarra helada, un vaso, y varias toallas húmedas. Fue directamente a Erce, que estaba de pie cerca del sillón. Erce le indicó que pusiera la bandeja sobre la mesa más cercana de café.
Me di cuenta de que el nuevo vampiro metió la mano en su bolsillo, sacó una botella de píldoras, y se la entregó a Erce antes de abandonar la sala tan silenciosamente como había entrado.
Erce saco una píldora de la botella y se acercó a Afrodita.
Me había movido antes de darme cuenta de lo que estaba haciendo, y me encontré agarrando su muñeca.
-“¿Que le estás dando?”-
Erce me miro.
-“Algo para calmarla, para disminuir su ansiedad.”-
-“Pero ¿y si pierde el contacto con Stevie Rae a causa de ello?”-
-“¿Prefieres dos amigas muertas o una? Elije, Alta Sacerdotisa.”-
Tuve que tragarme un grito de rabia. ¡Yo no quería perder a ninguna de mis amigas! Pero mi mente entendió que mi mejor amiga estaba a un océano y la mitad de un continente de distancia, y hacer que Afrodita muriera con ella era absolutamente innecesario.
Solté la muñeca de Erce.
-Aquí, hija. Toma esto.”-
Erce le ofreció a Afrodita la píldora y ayudó a Darius a sostener el vaso de agua helada en sus labios. Afrodita tomó la pastilla y bebió el agua como si hubiese estado corriendo una maratón.
-“Por dios, espero que sea Xanax ,”- dijo con voz trémula.
Pensé que las cosas estaban mejorando. Afrodita había dejado de llorar y mi grupo de amigos se había dispersado por las sillas y tapizados de la habitación.
Con excepción de Heath y Stark. Stark estaba a mi lado. Heath estaba de la mano con Afrodita. Él y Darius estaban hablando tranquilamente con ella. Entonces Afrodita gritó y se alejó de Heath y de los brazos de Darius, poniéndose a sí misma en posición fetal.
-“¡Me quemo!”-
Heath me miró.
-“¿No puedes ayudarla?”-
-“Puedo canalizar el espíritu. Eso es todo lo que puedo hacer. Stevie Rae esta en Oklahoma, ¡No puedo ayudarla!”- Prácticamente grite a Heath, derramando mi frustración por el enojo.
Stark, puso su brazo alrededor de mí.
-“Esta bien. Va a estar bien.”-
-“No sé cómo,”- dije. -“¿Cómo pueden ambas soportar pasar a través de esto?”-
-“¿Cómo puede un tipo malo convertirse en el Guerrero de una Alta Sacerdotisa?”- Contestó, y sonrió. –“Nyx, ella tiene su mano sobre ambas. Confía en tu Diosa.”-
Así que me quede allí, canalizando el espíritu, viendo la agonía de Afrodita y confiando en mi Diosa.
Afrodita de repente gritó, se tumbo de espaldas y gritó: -“¡Abran y tápenme!”-
Y luego se desplomó, sollozando de alivio en los brazos de Darius.
Me acerqué a ella tímidamente y se inclinó para que pudiera ver su rostro.
-“Oye, ¿estás bien? ¿Stevie Rae esta viva?”-
El rostro bañado en lágrimas de Afrodita se levantó para que pudiera encontrarse con mis ojos.
-“Se termino. Ella está en contacto con la tierra de nuevo. Está viva.”-
-“¡Oh, gracias a la Diosa!”- Dije.
Le toque el hombro ligeramente.
-“¡Estás bien, tu también?”-
-“Creo que sí. No. Espera, no lo sé. Me siento extraña. Como si mi piel no estuviera bien.”-
-Tu Vampira ha sido dañada,”- dijo Erce, en una voz apenas audible. -“Stevie Rae puede estar segura ahora, pero algo está terriblemente mal con ella.”-
-“Bebe esto, amor,”- Darius dijo, tomando un vaso fresco que le dio Erce y llevándolo a los labios de Afrodita. -“Esto te ayudará.”-
Afrodita tragó el agua. Era bueno que Darius estuviera ayudándola a sostener el vaso, porque ella temblaba tanto que no habría manera de que pudiera haberlo sostenido sin que se derrame el agua. Luego se echó hacia atrás, apoyada en sus brazos, con respiraciones poco profundas y pausadas, como si no pudiera tomar una respiración profunda, sin causar demasiado dolor a sí misma.
-“Me duele todo el cuerpo,”- oí que le susurraba a Darius.
Me acerqué a Erce, le tome la muñeca, y la aleje a un lugar donde no nos pudiera oír Afrodita.
-“¿No podría enviar a buscar a un curandero vampiro?”- le pregunté.
-“Ella no es un vampiro, sacerdotisa,”- dijo Erce, suavemente. -“Nuestro curandero no podría ayudarla.”-
-“Pero ella esta así por un vampiro.”-
-“Ese es el camino que cada cónyuge toma. Su destino está ligado a su vampiro. La mayoría de las veces el consorte muere mucho antes que el vampiro, y es bastante difícil. Esta situación se produce con menos frecuencia.”-
-“Stevie Rae no está muerta,”- susurré severamente.
-“Aún no lo esta, pero viendo a su consorte yo diría que está en grave peligro.”-
-“Ella es su consorte por error,”- murmuré. –“Afrodita no quería que esto sucediera. Tampoco Stevie Rae.”-
-“Intencional o no, todavía están vinculadas,”- dijo Erce.
-“¡Oh mi dios!”- Afrodita se enderezó, alejándose de Darius.
Su rostro era una máscara de shock que se transformó poco a poco para reflejar dolor primero, luego negación, y luego se estremeció una vez, tan violentamente que pude escuchar sus diente golpeándose, antes de cubrir su rostro con las manos y disolverse en lágrimas desgarradoras.
Darius me miró suplicante.
Rogando que Stevie Rae no estuviera muerta, fui hacia Afrodita y me senté a su lado en el sillón.
-“¿Afrodita?”- intente, sin éxito, evitar que las lágrimas se colaran por mi voz.
¿Cómo podría estar Stevie Rae realmente muerta? ¿Qué iba a hacer ahora, en un mundo lejos de ella y totalmente por mi cuenta?
-“¿Stevie Rae esta muerta?”-
Podía oír a las gemelas llorar, y vi a Damien tomar a Jack en sus brazos. Afrodita quito sus manos de su cara, y me sorprendí al ver su antigua y brillante sonrisa sarcástica a través de sus lágrimas.
-“¿Muerta? Claro que no, no está muerta. ¡Ella simplemente esta impresa con otra persona!”